Esta foto del faro de Lobadiz no es ninguna cosa extraordinaria, bien lo se, pero me gustaron tanto las sensaciones de aquella noche que me decidí a colgarla por aqui.
En aquella mágica noche sólo faltaron las viandas (digamos empanadas; pasteles varios etc) y una botella de vino, de todo lo demas había de sobra.
3 comentarios:
Con lo abrupto del terreno lo que menos hacía falta era vino ;-))))
Si acaso algo calentito.
Yo comparto la opinión de Fran, con una sopita calentita bajo ese cielo estrellado ibamos más que bien, y si no que se lo pregunten a Bea a ver que prefería.
Que le hagan la misma pregunta a mi amigo Roberto,,,seguro que dice ¡¡¡CHURRASCOOO!!,,y yo digo: "Con uno que lo diga basta",,eaa.
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